viernes, 15 de septiembre de 2017

Tiempo de ciclones


Esa expresión que tanto nos place decir: “Sin pérdidas de vidas humanas”, Irma se la llevó en su viento furibundo, al que le hicieron el juego la indolencia, la indisciplina social y la fatalidad. Y no digo la consabida situación del fondo habitacional, porque sería casi injusto mencionarlo ante las múltiples posibilidades de evacuación que siempre abre la Defensa Civil y cientos de hogares solidarios.

Nadie murió en Las Tunas, pero en otras provincias sí. Duele igual, sobre todo al imaginar lo fácil que hubiera sido evitar tamaña desgracia. Nadie murió en Las Tunas, pero perfectamente pudo haber sucedido, porque en plena “ventolera” no fue raro sentir a varios desandando las calles, olvidando que a esa hora cualquier elemento se puede convertir en proyectil.

martes, 25 de julio de 2017

Soto, sin fecha de caducidad

Ahora lo sé. Cuando un periodista entrevista a otro corre el riesgo de que inspirados por la plática la escena termine en: "No se grabó todo lo que conversamos", sin importar la altura de los pasajes que repasaron juntos.
Tan buen diálogo puede darse que nadie recordará mirar la grabadora, y de tomar notas menos, pues no te hallarás en plena faena laboral, sino solo y divinamente, conversando entre amigos. También sucede que dialogar con Juan Soto Cutiño, uno de los más carismáticos profesionales de la prensa tunera, puede resultar pura aventura y eso suma emotividades.
En la carrera lleva nada menos que 48 años y me aseguró que de jubilación "nada por ahora". Si hacen una encuesta en 26 nadie quiere verlo partir, porque él siempre anda con su agenda bajo el brazo, una sonrisa en los labios y tantas historias...

jueves, 1 de junio de 2017

Niños que me habitan (+fotos y video)

Intenté que la fiesta fuera para ellos, pero terminó siendo para mí. Gocé de lo lindo.
Se me ocurrió recomendarles a los niños de mi barrio, justo a ellos, que aprovecharan la infancia. Lo hice temiendo que los padres me lincharan, pero debía advertirles. Yo extraño tanto mis subidas a la mata de guayaba.
Les propuse que si sabían escribir hicieran un diario, donde confesaran las vivencias cotidianas, porque al crecer tendemos a olvidar.
Recuerdo que dije: “Muchos pensadores comparan la niñez con un borracho, todos se acuerdan de lo que hiciste, menos tú”. Rieron con mi chiste, pero Bragdiel, de 8 años, me miró cariacontecido, levantó su mano para intervenir como si estuviera en el aula y soltó: “¿No será mejor decir embriagado?”.

sábado, 13 de mayo de 2017

Jornada Cucalambeana en pleno Vedado…3 (+fotos y video)

Un largo recorrido nos lleva hasta Vedado 3. El terreno y la huella en los zapatos delatan la novedad: luego de mucho, mucho tiempo, ha llovido por aquellos lares.
Nos recibe quién debe. El profesor Guillermo Castillo y sus niños de la escuelita primaria Julio Antonio Mella, el plantel donde la totalidad de los alumnos cantan décimas, aprenden sonidos y palabras nuevas a través de redondillas y los consolidan con la estrofa nacional. Dominan de cinco a seis tonadas.
Solo un capítulo del legado de Castillo, autor del libro Ortodecimante, convertido en CD-DVD por Bis Music y hoy en los colegios del país para enseñar a escribir correctamente mediante el verso octosílabo.
“Para mí la décima más que tradición, es un recurso inteligente”, aclara a sus compañeros de viaje en el coche que nos deja justo en el corazón del guateque, donde asegura, está todo listo. En el cielo empieza a “armarse agua”, pero nada parará el convite luego de tanto empeño, de bafles trasladados bajo aguacero, de aserrín tirado sobre el fango.

lunes, 8 de mayo de 2017

Jornada Cucalambeana en meditación (+video)

Medio siglo. 50. Hermosa edad, esa en la que ya se ha vivido suficiente como para saber qué es lo importante y lo que no. Desde miradas mitológicas, religiosas y de la numerología constituye un guarismo relevante; indica, dicen, un salto superior, la fusión entre cuerpo y alma, mente y espíritu.
A tan ilustre cantidad de años llega en el 2017, del 28 de junio al 2 de julio, la Jornada Cucalambeana, la novia más fiel de la campiña, que no abandona su puesto de guardiana del patrimonio campesino. Allí se encontró a sí misma, y cualquier lobreguez que la aleje de ese trono, la espanta, enfurece, lastima.
Desde hace varias semanas, comenzaron los preparativos últimos para esta convocatoria, bajo la supervisión expresa de las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en el territorio.
Representantes de sectores diversos como las empresas Eléctrica, Etecsa, Comunales, Transporte, Forestal, Mantenimiento Constructivo, Vascal, Gastronomía y de Alojamiento dan parte de las responsabilidades otorgadas, los aseguramientos para que el jolgorio luzca sus mejores tonos.

viernes, 5 de mayo de 2017

¡Vamos a AvivArte!


Qué somos sino átomos dispersos, necesitados de conectar con el otro. Al hacerlo, bien se ha visto, aparece la maravilla. El reparto La Victoria, en esta ciudad capital, desde hace 12 meses acoge una aventura que busca ese encuentro.
El sueño, aunque apenas comienza, le llegó el 30 de abril del 2016, cuando nació el proyecto comunitario AvivArte y plantó la idea de elevar la calidad de vida de los que residen por aquellos lares. En primera fila, dos aliados, el arte y la Educación Popular.
Desde que Annia Salgado Peña, amante de la música, y Eddy Reyes Uliver, hombre de la plástica, colaboraron con la experiencia sociocultural Callejón de la Ceiba, imaginaron algo así para su barrio, allá, en la calle 49. Y de tanto idearlo, sucedió. Hoy, su casa, la número 28, cada tarde de sábado se convierte en laboratorio de creación de la zona.
Si acudimos a la cita, no sabremos qué escoger. Nos gustará acompañar a la infante que monta un nuevo tema, o a los pequeños que modelan el barro, aprenden algunos trazos del rostro humano en las clases de dibujo o se deciden por tocar piano y flauta.

lunes, 1 de mayo de 2017

La toma del Balcón por los aztecas

Cuando cumplieron el primer aniversario, y el espectáculo de celebración llenó el teatro Tunas, le nació la total certeza de que aquello funcionaría. Una vez, debido a muchos obstáculos, quiso dejar el proyecto, pero cómo abandonar a los niños. 
“Ya yo me muero con ellos”, dice Adalberto Garcés Viamonte, minutos antes de que el telón de ese recinto se abra nuevamente para recibir a sus “hijos”, es decir, Los aztecas del Balcón, ahora para festejar el tercer cumpleaños.
Aunque varias madres intentan poner orden, los charritos, próximos a salir al escenario, andan inquietos. Corretean, se miran en el espejo, conversan, ríen y piensan en el homenaje que harán con sus voces a nombres ilustres de la tierra mexicana como Juan Gabriel, Vicente Fernández y Pedrito Fernández.
De esas figuras hablan como si se trataran de tíos o abuelos, los sienten cercanos, queridos. Quizás por eso no están nerviosos, por lo menos es lo que nos aseguran dos de los fundadores Yeinier Leandro Hechavarría Rodríguez y Luis Miguel Rodríguez Hernández. Ambos transitan por la adolescencia. 
Ninguno de ellos tiene cantantes en el árbol genealógico, pero desde la infancia amaron la música. Yeinier apenas conocía el repertorio de la tierra de Juárez, sin embargo, asegura haber encontrado belleza en sus notas. Mientras, Luis Miguel sí creció oyendo a clásicos del género y se decidió fácilmente, paso con el cual vino otro: los llantos de su mamá cuando lo ve empinarse en el escenario.

martes, 18 de abril de 2017

Lucy, el ciervo herido y la Historia contada diferente (+video)

Las Tunas: Fabular a partir de la verdad histórica, eso hace el texto La sombra del ciervo herido, de la escritora tunera Lucy Maestre Vega, que, publicado por Ediciones Santiago, se erige en gran ejemplo de cómo humanizar a los héroes.
Tomando como referentes a patriotas de la Guerra de los Diez Años, crea ocho cuentos dedicados al público adolescente. El título fue presentado aquí durante la reciente 26 Feria Internacional del Libro y al comentarlo, el narrador y poeta Carlos Esquivel resaltó la singularidad de estas páginas, y la gran carga de ternura que atesoran.

"Trascienden por su honestidad y sencillez, son especiales y distintivas. Buscan una mirada perspicaz desde la fabulación, la poetización. No descreen del hecho, de lo real y matizan con detalles de la vida íntima", expresó.

martes, 11 de abril de 2017

La novela de la Feria

Una Feria internacional del Libro para olvidar. Eso tuvimos. Una que le precedió demasiada tragedia como para reponerse de ese mazazo, con el Centro Provincial del Libro y la Literatura (CPLL) debatido entre ineficiencias propias y el escaso respaldo a su gestión editorial.
Sin embargo, contra toda lógica, la noticia es que, aunque sea, tuvimos nuestra versión apocopada, pues ni siquiera eso se vislumbraba meses atrás. El buen juicio impuso carácter, la sensibilidad de entender que esta celebración nos pertenece sin remedio. 
Ya sé, no todos buscan el gran texto, algunos la esperan para el título de cocina o el de colorear, justos los que ahora brillaron por su ausencia. Pero bien sabemos que tales publicaciones pueden ser un pretexto para hallar páginas más edificantes, todo está en que la cita propicie ese encuentro, algo que, disculpen la repetición, brilló por su ausencia. 
Y las razones laten, claro, en los anaqueles que solo escalaron a las 215 novedades, pero también en el diseño que desaprovechó espacios para promocionar creaciones y autores a viva voz y orientar al público de lo que en los estantes hallaría. La Plaza Cultural anduvo de silencio a música baja en extremo. De fiesta aquello no tuvo nada; ni siquiera el Tesoro de Papel, ubicado en el parque Maceo, salvó la honrilla.

jueves, 6 de abril de 2017

Las Tunas tiene… Alas de papel

Lejos, muy lejos de lo que un día fue, anda la Feria Internacional del Libro en su edición 26. La palidez le acompaña, sobre todo, en las propuestas que desde los anaqueles deben convocar al lector. 
La cifra no parió más, se quedó en 215 novedades literarias y 20 mil ejemplares. Y eso hace que el centro histórico más pequeño del país parezca inmenso para tan poca oferta, dentro de la cual hay verdaderas joyas, pero andan en lotes escasos.
Sin embargo, la Feria está aquí, y su espíritu es gallardo, persistente, porque se siente imprescindible, y nosotros no podemos cambiar esa historia. De ahí que aflore con fuerza por momentos, y nos deje beber de su cáliz, dedicado ahora al intelectual cubano Armando Hart y a Canadá, como país invitado de honor. 
Varios de esos instantes se vivieron en su primer y segundo días. Lo sentimos cuando escuchamos a tantos tuneros en busca de un nuevo “inquilino” de casa: “¿Tiene la novela de Padura?”, “De criminalística, ¿le ha llegado algo?”, “Quiero estudiar periodismo, ¿qué me recomendaría?”; “Este libro lo compré para mis niños, sigo intentando que les guste leer, en algún momento cogerán la idea”.

jueves, 30 de marzo de 2017

26 Feria del Libro, en resistencia

Vuelve la Feria Internacional del Libro. Ahora vestida de su capítulo 26, para intentar otra vez ser el motivo de salir de casa en busca de alguna buena sorpresa, y regresar con la lectura bajo el brazo.
Las Tunas andará del 5 al 9 de abril tras esa foto para subirla a Facebook  o Twiter, para sentirse aliviada de tanto estrés cotidiano. Pero no la tendrá muy fácil, corren vientos huracanados en contra, que no han querido apartarse para que el mayor festejo literario del país tenga aquí una sede de altura. Es así como, a no ser que suceda un milagro, o varios, viviremos la cita con menos títulos a la venta de los últimos años.
Las causas para que hoy las oficinas del Centro Provincial del Libro (que ahora hacen de almacén a falta de uno propio decoroso) amontonen en sus recodos solamente 200 novedades literarias y 13 mil ejemplares, se resumen en una demoledora razón: la añeja y gran deuda de la entidad con varias instancias, ascendente a 600 mil pesos, la cual le impide la compra de textos.
Le debe sobre todo a la Distribuidora Nacional del Libro, y como en cualquier trato económico, si no pagas, no recibes beneficios. Aun así, se ha sido benevolente y la cantidad de títulos llegados están porque la Feria es sagrada.  

jueves, 16 de marzo de 2017

Gianny, un buscador de historias


Siempre que lo encuentro le pregunto en qué nueva aventura anda, y él nunca deja de contestar algo interesante. Es como si no reposara de la creación, como si ese burbujeo fuera su aire natural.
Cualquiera creería que Gianny López Brito tiene más edad, que su almanaque ha vencido múltiples páginas entre los pasillos de TunasVisión, tantas como para suponer culpable de la pericia a los años de labor. Pero no, solo lleva cinco allí. Es joven, tan joven que admira verlo descorriendo las cortinas del buen hacer sin haberle llegado la experiencia.
Eso no significa puertas cerradas al aprendizaje, ¡tiene tanto por descubrir todavía! Y en su caso resulta lo mejor, porque él quiere el hallazgo. En el corto tiempo de graduado de Periodismo ya hay que reconocerle su sensibilidad, capacidad de trabajo y sentido para encontrar hechos singulares, y contarlos desde donde mejor se puede ver la complejidad y hermosura de la existencia, el rostro humano.

viernes, 3 de marzo de 2017

La sinfonía que nos falta

Iniciemos preguntando: ¿Le parece importante que Las Tunas tenga una orquesta sinfónica? En caso que usted sepa poco del asunto, explico: si gusta  de la pelota o el fútbol, que haya aquí una agrupación de este tipo equivale a la existencia de un buen equipo de cualquiera de esas disciplinas.
Es lo máximo, la pura gloria en materia de formaciones musicales de la línea de concierto. Ahora mismo Las Tunas y Cienfuegos son las únicas provincias del país autorizadas a crear un elenco de tales características. Nos llevaron hasta ahí las potencialidades cultivadas en la escuela profesional de arte El Cucalambé (EPA).
Hace falta el permiso porque hablamos de un quehacer subvencionado, el Estado protege el salario de los instrumentistas, en aras de alentar el desarrollo del género, signado por su alejamiento de lo comercial.
¿Pero qué hace esta periodista hablando de fundar una orquesta sinfónica cuando tantas carencias y problemas merodean a Cultura en el territorio? Interrogante lógica, no me molesto, lector, si en su cabeza revolotea. Sin embargo, la dirección del sector deberá buscar solución para todos los dilemas que lastra, y para este también, pues qué sentido tiene formar (por demás bien costoso) a músicos y luego no darles voz lo suficiente o favorecer con la inactividad la emigración.

martes, 21 de febrero de 2017

Matarile, el arte del encantamiento


Por Carlos Esquivel

Guillermo Vidal me cuenta un sueño terrible. Un atracador enmascarado le cierra el paso y lo conmina a elegir entre la vida y la literatura. Un cuchillo comienza a hundirse en su cuello, sangra, siente el dolor más allá de los términos que el sueño reproduce.
La literatura, me dice, escogí la literatura, aunque al atracador de la pesadilla le responde algo distinto. El miedo lo baña. Entiendo su metáfora como entiendo las metáforas que el sueño atrae y reprime. Estar vivo y condenado a escribir por (para) tus semejantes. Lo sabemos, o fingimos saber: se escribe porque se aprende a sufrir.
La publicación otra vez de Matarile, el mejor texto de Vidal, concurre en homenaje infinito a una escritura que descarna las esencias hacia ese viaje de fabulación interminable: la obra completa del iluminado tunero. Más que novela, Matarile traza un mordaz juego de complicidades, como si aconteciese el pleito en el que los contendientes decidieran los golpes de sus contrarios.

viernes, 17 de febrero de 2017

Los días de Guillermo y Toño

Amarillentas por el tiempo lucen las páginas. Son más que papel. Son el rastro virtuoso de un hombre que cifró allí todas sus esperanzas. "¿Tendrá éxito mi novela? ¿Qué pensará la gente de Toño, este personaje mío tan loco y tan cuerdo?". Quizás se preguntaba Guillermo Vidal mientras escribía Matarile.
El manucristo duerme con los ojos abiertos, como quien no se permite modorra alguna, en la biblioteca provincial José Martí. Allí, su letra tirada al viento. Allí, las huellas de sus manos. Y una no escapa de fabular que llenó tantas cuartillas de un tirón, cual gesto enfebrecido. ¿Acaso fue así?
La escritora Lucy Araújo recuerda que el autor de Las manzanas del paraíso, su maestro, le pidió a ella y a otros amigos encontrar para él un lugar alejado, tranquilo, donde terminar Matarile. El entonces motel Las Caobas, en Manatí, tuvo el honor de recibir aquellos días de alumbramiento.

jueves, 9 de febrero de 2017

Arte abstracto, como Juan por su casa

Hubo hasta quien pintó la sala para recibir al “invitado”. Lástima que sea solo eso, un invitado. Si se pudiera quedar…
El hijo de Marlenis, soñando con una estancia más larga, inquirió: “¿Cuánto costará? Deberíamos preguntar”. Y la hija  de Maritza, vía Facebook, admiró la maravilla que ahora recibe los amigos en su hogar cubano. “Mami, ¡qué lindo!”, le escribió.
Tanto Marlenis Riquenes Rojas como Maritza Ledea Peña andan como sus párvulos, encantadas. “Estoy feliz con la idea. Yo dije que si necesitaban, quitaba hasta el televisor. No quiero que me los lleven”, cuenta la segunda, quien desde enero ofrece a las clientas de su peluquería el valor agregado de un minuto de arte.
La primera por su lado, maestra de profesión, habla de lo que tanto conoce, el valor de educar. “Somos incultos en esta manifestación, tenemos la oportunidad de aprender”, concluye.

miércoles, 1 de febrero de 2017

Payasos para curarte mejor (+Fotos)

No creo que Cristian o Marcelo olviden el día que inició como otro cualquiera y terminó siendo uno a todo color. La rutina de los ejercicios en la Sala de Rehabilitación del Hospital Pediátrico tunero dejó de repetir “arriba, abajo”, para ir en busca de unos amigos medio alborotados, pero con un corazón inmenso.
Cristian y Marcelo formaron parte de la comisión de recibimiento y… de juego también, por supuesto. Ante sus ojos y de los otros infantes que allí sienten alivio a sus dolencias, estuvo una avanzada del grupo de 30 valientes sensibles que se forman actualmente en Las Tunas como payasos terapéuticos. En un dos por tres entró más Sol por la ventana y las sonrisas lucieron rozagantes.

domingo, 29 de enero de 2017

Tras el paso de un “pie mojado”



Buscando una historia encontré muchas. Supe del sobrino que estuvo cerca de que se lo comieran las pirañas, del primo que nadie aún sabe dónde está, de la hija baleada sin misericordia cuando faltaba muy poco para culminar la travesía. Buscando una historia…
“Periodista, de eso no quiero hablar, recuerdo y me parece que estoy de nuevo allí, en aquel calvario. Yo nada más le digo una cosa, a mí me pueden jurar ahora mismo que si pago el viaje en lancha, me llevarán hasta la puerta de mi casa en Estados Unidos a alguien de la familia, y jamás dejaría que sucediera. Nadie debe vivir lo que viví”.
Está de paso en Las Tunas. La frase le creció dentro muy poco después de que nos presentáramos. Dio tiempo a que soltara unas ráfagas de vivencias, pequeños destellos, como para que viera que no mentía, había demasiado dolor en el recuento pedido.
Del breve diálogo conocí del día que caminó 50 kilómetros por terreno angosto; de la hora que rogó por la lluvia, se moría, literalmente, de sed y por demás, estaba todo quemado; de las veces que vio a sus compañeros de trayecto perder el pudor y hacer sus necesidades delante del resto porque no quedaba de otra; de lo amargo de comprobar cómo algunos olvidan hasta la humanidad, pueden ver a otro hundido en el fango y no ayudar porque “si el guía se te va, perdiste todo. Aquello se trata de sobrevivir”.

lunes, 23 de enero de 2017

Equivocados



Bien dicen por ahí que la felicidad nunca viene completa. Es como si en el puerto de embarque, el encargado de nuestra suerte olvidara una tuerca o un tornillo. Todo queda flojo.
El 2016 trajo la telefonía fija a mi hogar. Para los periodistas (cubanos) eso es oro molido, lo primario. Adiós a contactar a fuentes por equipos públicos o enterarse a deshora de cualquier hecho, “porque no pudimos localizarte”.
Pero con el aparato llegaron algunas molestias: los equivocados. Y no hablo de los que marcan a un lado creyendo que es otro. No, aunque seguro, lector, fue lo que usted pensó.
Hablo de una parte de esos primeros, aquellos que ante la aclaración: “Está equivocado, es una casa particular”, sin más cuelgan estrepitosamente, tan estrepitosamente que debes acariciarte el oído para ver si no sufrió daño. Y te quedas extrañando un “Disculpe”.
A veces sin palabra agradable de por medio, da tiempo escuchar las maldiciones que lanzan del otro lado de la línea por no hallar a quién buscaban. Resulta que mi número se parece mucho a otros. Acopio, Empresa de Prefabricados, heladería La Fuente, policlínico Gustavo Aldereguía… la lista de un verdadero camaleón, aunque cierto departamento de la Dirección de Educación es el más recurrente.

viernes, 13 de enero de 2017

La música tiene su Casa en Las Tunas


Viejo sueño gritado a cuatro voces. Qué placer escribir estas líneas: Las Tunas ya tiene su Casa de la Música, que para más buenaventura lleva el nombre de Emiliano Salvador, el egregio pianista, hijo de Puerto Padre y referente del jazz latino. Ese apelativo es el primer triunfo del lugar, también su primer compromiso.

Una hermosa casona antigua, vestida de patrimonio y renovación, le pone toque de novedad a la avenida Vicente García. La gente pasa y todavía mira extrañada hacia su interior, donde se han rescatado elementos originales de la edificación. El salón principal recibe a los clientes con el escenario para grupos de pequeño formato y las paredes premiadas de fotos, todos ídolos del pentagrama del terruño. 

Luego el patio abraza. La parte más lateral es muy acogedora, y entre mesas, sillas, el bar y una esmerada ambientación artística, se pinta sola para actividades alternativas. Una puerta anuncia otro descubrimiento: la salita de concierto, con 36 lunetas. 

jueves, 5 de enero de 2017

El tufo de la indolencia

La mujer iba como si con ella no fuera. Parecía que andaba por el Prado habanero, exhibiendo su cartera. Pero no era un objeto de pasarela lo que le acompañaba, sino el saco con los desperdicios del cerdo que su familia comería el último día del 2016. Pretendía dejarlo en plena área deportiva del seminternado Jesús Argüelles Hidalgo, ciudad de Las Tunas.
Arrastraba su carga pesada por toda la calle, decorando el paso con un hilillo rojo, como vestigio del delito. Se notaba cómoda en su misión, hasta saludó a un vecino.
La vi desde relativa corta distancia, y cuando llegué al lugar del hecho, entendí que no resolvía nada con reclamarle a la señora. Alrededor del suyo otros tantos bultos pestilentes descansaban, en espera que la descomposición natural se llevara la fetidez que inundaba el sitio. Aún queda algo de esos aires contaminados.
Vivo por aquellos alrededores desde hace más de 25 años, y sé que la escena real aquí contada, repetida sin misericordia, ha sido una cruz de la que no ha podido desprenderse tan concurrido espacio.