Una
muestra expositiva de lo aprendido por los alumnos despidió recientemente la segundaedición de los cursos de verano impulsados por la Oficina Regional
CIERIC-UNEAC (Centro de Intercambio y Referencia-Iniciativa Comunitaria y Unión
de Escritores y Artistas de Cuba). El gran respaldo del público y la presencia
de importantes proyectos comunitarios del país no pudieron menos que
obsequiarle el éxito a esta convocatoria.
Niños,
adolescentes y adultos pasaron cinco días memorables junto a los fieles amigos
Mirna Figueredo y Josué López que volvieron con sus sorprendentes origamis
(proyecto Universo de papel, Santiago de Cuba); la dulce Carmen Soto y sus
muñecas con historias (proyecto Carsueños, Camagüey) y el creativo Pablo Muñoz
(Fantasía color de la niñez, Guáimaro), quien en el reciclaje ha encontrado la
juguetería más hermosa.
Completaron
la delegación, el emprendedor José Luis Leyva (ModAzul, Puerto Padre),
preocupado por los buenos modales y el mantenimiento de técnicas tradicionales
de la costura y el tejido, y el talentoso Marcos Menéndez que otra vez vino a
enseñar cómo hacer un dibujo animado.
La
galería taller de escultura Rita Longa, sede del proyecto Callejón de la Ceiba , recibió nuevamente la iniciativa que pretende quedarse
como actividad anual de la
Oficina.
Para
Carmen, una mujer realmente incansable que se robó el corazón de todos, esta
experiencia significó cumplir un anhelo que la acompaña siempre.
Pablo Muñoz y sus juguetes, que nacen a partir de un pomo plástico cualquiera |
“En
cada encuentro nacional que tenemos los coordinadores de proyectos pedimos que
se promuevan acciones como estas, porque así intercambiamos saberes, damos vida
a la articulación y funcionamos como red.” Pero ella no se conformó con
enseñar, a su paso dejó fundado dentro del mismo Callejón, otro proyecto, Despertar
de un sueño, colmado de muñequeras que desde este momento asumen la
responsabilidad y la belleza que su “profesión” indica.
El
esparcimiento sano fue una de las mayores conquistas de los cursos, así lo demostraron,
por ejemplo, los infantes matriculados en las clases de animación, quienes anduvieron
la semana asombrados por lo fácil que es hacer un “muñe”, y ya se imaginan cineastas.
Algunas de las muñecas hechas por las nuevas alumnas de Carsueños |
Los dos audiovisuales que realizaron, bañados de la gracia infantil, dejaron a
todos gratamente sorprendidos. Como buenos niños hablaron de amor y del cuidado
al medio ambiente. Ellos solitos
diseñaron personajes, los fondos y
pusieron las voces.
En
un grado más íntimo tal vez, mucho ganó el Callejón de la Ceiba , pues algunos de los
“profes” como Pablo y José Luis prometieron volver a su sombra con regularidad
para seguir impartiendo habilidades. “Eso nos fortalece como acción
comunitaria y confirma la intención que
siempre hemos tenido, de que nuestro proyecto nunca sea un lugar de despedidas,
siempre de encuentro”, comentó Othoniel Morffis, su líder.
Los talleres de verano llegaron para quedarse, si alguien tenía dudas, ahora han quedado borradas.
Carmen en acción |
José Luis Leyva y su proyecto ModAzul trajo la moda hasta vestida de reciclaje |
Los niños pintaron los fondos y con sus manos modelaron los personajes de los animados |
Justo el momento cuando Callejón TV hacía la premier de los "muñe" |
Quién dice que las niñas ya no usan batas |
Mirna siempre con su increíble paciencia ayudando al nacimiento de una nueva figura |
Esta vez los alumnos se dispusieron a realizar origamis más complejos |
Es de papel, sí como se los cuento |
Y la foto que no podía faltar: yo con la Carmen |
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